Kombucha para refrescar el verano

La kombucha o té de kombucha es una bebida fermentada hecha a base de té, azúcar y una colonia gelatinosa de bacterias y levaduras, denominada SCOBY, la cual es la encargada de otorgarle su característica acidez.

Esta colonia de microorganismos crece y aumenta su capacidad en función de la condiciones del entorno, donde el tiempo y temperatura son factores claves. A un mayor tiempo de fermentación, mayor será el grado de acidez y de alcohol, aunque este es residual y apenas suele llegar al 0,5%.  Es en este proceso también, donde se forman las burbujas que caracterizan a este refresco.

El origen del té de kombucha se remonta a hace más de 2000 años, en torno al año 200 a.C. Cuando en China, concretamente en la región de Manchuria, se comenzó a preparar esta bebida entre la dinastía debido a sus propiedades terapéuticas. Con el paso de los años, se hizo común su consumo en países como Japón y Rusia, pero no fue hasta principios del s. XXI cuando se convirtió en una bebida frecuente en nuestro país.

La kombucha tradicional ha ido evolucionando y actualmente se le pueden añadir diferentes jugos de zumos, dotándolos de un sabor propio e inigualable a cada una. En esto son expertos los segovianos de Fuzz-co, que desde Otero de Herreros elaboran sus propias kombuchas. Todos los productos utlizados en Fuzz-co para preparar sus kombuchas son ecológicos, desde el té negro de la variedad Ceylan, a las frutas que acompañan el sabor a sidra de manzana que lo caracteriza.

Cuentan con una amplia y novedosa variedad de sabores, desde los habituales de la marca como son; la Super Fuzz Kombucha con sabor a hierbabuena, mandarina y jengibre, Ultra-Violet Kombucha con toques de pomelo y violetas y Justicia Cósmica a base de jugo de manzana verde y vainilla Bourbon. La estrella de este verano no podía ser otra que la edición especial Melon Aid Kombucha. Esta edición especial del verano 2022 viene acompañada de los mejores jugos de melón, limas y toques de hierbabuena, dispuestos a refrescarnos el caluroso verano.

El té de kombucha cuenta con una gran variedad de propiedades y vitaminas beneficiosas para la salud como; vitaminas del grupo B, C, D, E y K, ácidos orgánicos esenciales y minerales. Todo esto hace que su ingesta produzca un amplio espectro de  beneficios para la salud, entre los más destacados encontramos: una importante fuente de probióticos, ayuda al buen funcionamiento del sistema digestivo, contiene propiedades antioxidantes de antienvejecimiento celular, fortalece el sistema inmunitario y es antibacteriana.

La kombucha debe conservarse en un lugar alejado de la luz solar y a baja temperatura, por lo que su estancia en el frigorífico y su posterior consumo en frío la convierte en un refresco ideal para los días más calurosos de esta temporada estival.

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