Aunque es una fecha poco conocida, hace apenas unos años se ha incorporado a la lista de celebraciones internacionales el 24 de noviembre como el Día Mundial del Vino Tinto, una bebida mítica que ha acompañado a la humanidad desde siempre en nuestras comidas y cenas. Las variedades del vino tinto producen rojos rubí profundos, sutiles ámbares y tonos marrones, aludiendo con sus colores al cambio de estación que se avecina.
El vino tiene una gran importancia histórica y por eso nace este día mundial, para celebrar y homenajear a este brebaje. Pero además de una repercusión histórica, la industria del vino ha llegado a ser una de las que más peso tienen dentro de la gastronomía mundial, teniendo un gran impacto de carácter tanto social, como económico. Además el vino tiene un impacto, comúnmente desconocido, en el ámbito de la salud; con este día conmemorativo también se quiere poner el acento en el carácter antioxidante de esta bebida que, tomada con prudencia, responsabilidad y moderación, puede ser beneficiosa para nuestras células, nuestro sistema circulatorio e incluso llegar a prevenir enfermedades cardiovasculares.
Hablando de propiedades y beneficios, vamos a ver más detenidamente las virtudes del vino tinto, que viene muy a cuenta en un día como hoy:
- Previene enfermedades cardíacas: aunque no sirve para curar enfermedades como tal, su alta concentración en polifenoles y vitamina E sí ayudan a mantener la sangre y los vasos sanguíneos limpios.
- Ayuda a prevenir el colesterol: como ya hemos comentado, esta bebida es muy rica en polifenoles como el resveratrol: un componente con alta concentración de antioxidantes que evita la formación de coágulos y de lipoproteínas de baja densidad.
- Aumenta los niveles de Omega 3: consumidores habituales y moderados de vino presentan más concentración de ácidos grasos Omega 3 en sangre, el cual es un elemento imprescindible para el correcto funcionamiento del organismo.
- Previene la artrosis: una media de entre cinco y diez copas de vino tinto durante la semana podría reducir las probabilidades de contraer artritis reumática hasta en un 50%, según algunos estudios realizados en diferentes partes del mundo.
- Reduce el riesgo de padecer cáncer: algunas de las propiedades del vino tinto residen en sus antioxidantes. Entre otros efectos positivos para la salud, estos componentes son útiles para reducir el riesgo de sufrir cáncer de distintos tipos.
- Ralentiza el envejecimiento: el resveratrol, un elemento que se concentra en la piel de la uva tinta, es un elemento que, ayuda a ralentizar el proceso de envejecimiento.
- Protege la piel: las propiedades del vino tinto en la piel residen en los flavonoides, un componente que refuerza nuestras células y que consigue reducir las consecuencias negativas de la exposición a los rayos ultravioleta.
- Ayuda a perder peso: en muchas ocasiones se ha considerado un mito, pero durante los últimos años diversos estudios afirman que ciertos componentes del vino tinto permiten activar un gen que dificulta la formación de células adiposas.
- Refuerza las capacidades cognitivas: consumir vino tinto de manera regular y moderada ayuda a recudir el deterioro cognitivo propio de la edad y, con ello, demencias y enfermedades degenerativas cerebrales.
- Una vida más feliz: el vino tinto está relacionado con el aumento de endorfinas, una sustancia natural famosa por su capacidad para aliviar el dolor originado por causas diferentes, esquivar la depresión y, en definitiva, tener una vida más feliz.
En Alimentos de Segovia contamos con una denominación de origen protegida 100% provincial que es la llamada “Vinos de Calidad de Valtiendas”, donde podemos encontrar algunas bodegas como Bodegas Vajal, Bodega Tinto Redreja, Bodega Valmenia o Bodegas Zarraguilla, entre otras. También contamos con alguna bodega de la archiconocida denominación de origen “Rivera del Duero”, como es el caso de Severino Sanz, situada en Montejo de la Vega de la Serrezuela.
¡Chin-chin! 🍷
